Por: David López Velázquez.
Huixtla, Chiapas.- Julio 08 de 2014.- En horas de la madrugada de este 8 de julio, fue localizado el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino que murió bajo los escombros de la marquesina de una casa que se derrumbó por el fuerte temblor de tierra que se produjo el lunes 7 por la mañana.
De acuerdo a las fuentes de la Policía Municipal de esta localidad, informan que a la una de la mañana de este martes 8 de julio, cuando realizaban el patrullaje de vigilancia en calles y avenidas, les fue reportado de la unidad 027 que sobre la Calle Francisco Zarco, entre las Avenidas Juárez y González Ortega, se hallaba el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino bajo los escombros que cayeron de una casa, propiedad de Mario Morales López, ubicada en ese sector de la ciudad.
Al lugar acudieron los elementos de Vialidad, Protección Civil Municipal y Protección Civil del Estado, con la unidad de rescate y siete brigadistas al mando del jefe de grupo paramédico Joaquín Ernesto Montes Molina, para las labores de recuperación del cuerpo que se hallaba bajo los escombros.
A las 3:00 horas se presentó el titular del Ministerio Público, Lic. Imanol Chacón Rivera, en compañía de agentes periciales, quienes realizaron el peritaje correspondiente y ordenaron el levantamiento del cadáver que fue trasladado al Servicio Médico Forense de la ciudad de Tapachula, Chiapas.
El occiso respondió en vida al nombre de Ignacio Samayoa Sánchez, de 74 años de edad, mismo que fue identificado por su hijo Honegar Samayoa Orozco, quien aseguró que su papá tenía su domicilio en la manzana 10, lote número 37 de la Colonia Bella Vista de este municipio, de donde había salido un día antes como a las 6:00 horas rumbo al Hospital de esta localidad porque se sentía mal de salud.
El pobre septuagenario no alcanzó a llegar al Hospital ya que la muerte lo sorprendió al registrarse el fuerte sismo que hizo que se derrrumbara la marquesina y parte del frente de la casa que se localiza sobre la Calle Francisco Zarco Oriente, y todo el material pesado le cayó encima dejándolo sepultado.